miércoles, 22 de octubre de 2014

II Semana de Religiosidad Popular

Os recordamos que a principios de noviembre se celebrará la II Semana de Religiosidad Popular, organizada por la delegación de Religiosidad Popular del Arzobispado de Valladolid. Os animamos a participar. EL programa es el siguiente:

Del 3 al 7 de Noviembre de 2014
Salón de Actos de Acción Católica (Antiguo Teatro Cervantes)
20,30 Horas

Lunes 3
"Que espera la diócesis de las cofradías"
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Ricardo Blázquez Pérez, Arzobispo de Valladolid
Martes 4
"La espiritualidad Cofrade"
Rvdo. Sr. D. Julio Alberto de Pablos de la Esperanza, Director del Centro Diocesano de Espiritualidad
Miércoles 5
"Significado de Cofradía y Hermandad"
Rvdo. Sr. D. Oliver Fernández López, Capellán de la Residencia "Ntra. Sra. del Carmen"
Jueves 6
"La figura del Consiliario y del Párroco"
Ilmo. Sr. D. Luis Argüello García, Vicario General de la Archidiócesis de Valladolid
Viernes 7
"Reflexiones desde la Acera"
D. Angel Cuaresma Renedo, Periodista

martes, 21 de octubre de 2014

Lotería de Navidad

Como todos los años, la Cofradía participa en el sorteo de Navidad con el número 06524. Todo aquel interesado en comprar papeletas de lotería o participar en su venta podrá hacerlo en nuestra sede (en horario de oficina). Así mismo, la lotería podrá adquirirse en la cafetería “As de Copas”, en el quiosco de la plaza de Santa Ana y en el Museo del Real Monasterio de San Joaquín y Santa Ana.

Convocatoria a la Comisaría del Santo Cristo Yacente

Queda abierto el plazo de inscripción para formar parte de la Comisaría del Santo Cristo Yacente. Los interesados podrán presentar un escrito en la Sede de la Cofradía, bien personalmente, bien por correo ordinario, donde conste un número de teléfono o e-mail que permita al Hermano Mayor-Comisario ponerse en contacto con ellos. Se añade la posibilidad de contactar directamente con el Hermano Mayor-Comisario a través de la dirección de correo electrónico rafaesparza@hotmail.com. 

Defender la vida humana es tarea de todos

Nota de la CCXXXIII Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española

1. Ante el debate abierto con motivo de la retirada por parte del Gobierno del "Anteproyecto de Ley para la protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada", la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española desea de nuevo hacer oír su voz. La vida humana es sagrada e inviolable y ha de protegerse desde la concepción hasta su fin natural. En esa defensa ocupan un lugar privilegiado los más débiles: aquellos que habiendo sido ya concebidos no han nacido todavía. La ciencia prueba que desde el momento de la concepción hay un nuevo ser humano, único e irrepetible, distinto de los padres.

2. No se puede construir una sociedad democrática, libre, justa y pacífica, si no se defienden y respetan los derechos de todos los seres humanos fundamentados en su dignidad inalienable y, especialmente, el derecho a la vida, que es el principal de todos.

3. Proteger y defender la vida humana es tarea de todos, principalmente de los Gobiernos. España sigue siendo, por desgracia, una triste excepción, al llegar incluso a considerar el aborto como un "derecho". En este sentido es especialmente grave la responsabilidad de quienes, habiendo incluido entre sus compromisos políticos la promesa de una ley que aminoraba algo la desprotección de la vida humana naciente que existe en la vigente normativa del aborto, han renunciado a seguir adelante con ello en aras de supuestos cálculos políticos. Hay bienes, como el de la vida humana, que son innegociables.

4. Es cierto que la existencia humana no está libre de dificultades. La Iglesia conoce bien los sufrimientos y carencias de muchas personas a las que se esfuerza en ayudar en todo el mundo con el ejercicio de la caridad, que es el distintivo de los discípulos de Jesús (cfr. Jn 13, 35), del que dan testimonio tantas personas e instituciones eclesiales. Pero, también es verdad que, como nos advierte el Papa Francisco, aún hemos de hacer más "para acompañar adecuadamente a las mujeres que se encuentran en situaciones muy duras, donde el aborto se les presenta como una rápida solución a sus profundas angustias" (EG, 214). En ello están empeñadas muchas asociaciones eclesiales y civiles, a las que queremos apoyar al tiempo que pedimos a las Administraciones públicas un esfuerzo más generoso en políticas eficaces de ayuda a la mujer gestante y a las familias.

5. Por otro lado, no es momento, por difícil que pueda parecer, para la desesperanza y el desencanto democrático ante reveses legislativos. Al contrario, son numerosos los voluntarios y las organizaciones de apoyo a la vida, promoción de la mujer y de solidaridad con los más necesitados de la sociedad, quienes nos animan a seguir adelante, extendiendo la civilización del amor y la cultura de la vida, y a abrazar sin condición a todos, especialmente a los que más sufren, como son los más pobres, los inmigrantes, los parados, los sin techo, los enfermos y todos aquellos, en definitiva, que se encuentran en las periferias sociales y existenciales. Y por supuesto, acompañar sin descanso a las madres embarazadas para que, ante cualquier dificultad, no opten por la "solución" de la muerte y elijan siempre el camino de la vida, que es el de la realización más plena de la verdadera libertad y progreso humano. Oremos para que así sea con la ayuda de Dios.

Madrid, 1 de octubre de 2014

viernes, 17 de octubre de 2014

El Sábado Santo: junto al sepulcro del Señor

La liturgia y la tradición de la Iglesia católica señalan dos líneas muy claras para el Sábado Santo. Por un lado permanecer junto al sepulcro del Señor, y por otro “la hora de la Madre”.

Respecto a esta segunda cuestión, en nuestra Cofradía hemos carecido siempre de una advocación mariana que es absolutamente necesaria, y algo en lo que deberíamos trabajar a corto o medio plazo. Bien es verdad que durante mucho tiempo la preciosa Dolorosa de Pedro de Mena, de gran valor artístico, ha estado presente junto al Santo Cristo yacente en nuestros cultos cuaresmales. Y más recientemente, ha venido ocupando su lugar la Virgen del Capítulo, una imagen de mayor interés procesional y con una estética de Virgen de la Soledad, mucho más acorde con el Sábado Santo, en el que la Madre permanece junto al sepulcro de su Hijo, esperando llena de fe su victoria sobre la muerte.

En lo que se refiere a la permanencia junto al sepulcro, el Directorio de Piedad Popular y Liturgia indica que “durante el Sábado Santo la Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su Pasión y Muerte, su descenso a los infiernos y esperando en la oración y el ayuno su Resurrección". Además dice que no debe anticiparse la celebración pascual, debiéndose reservar ésta para la noche y el día de Pascua.

Es llamativo comprobar que en nuestra ciudad el Sábado Santo se está considerando como no procesional, a diferencia de lo que ocurre en localidades de nuestra propia diócesis o en otras como Sevilla. Y si nos atenemos a lo que dice el Directorio, una procesión bien definida por estas líneas maestras no es contraria a la liturgia del día, sino todo lo contrario. Por eso, como cofrades del Santo Entierro, nuestro día grande debe ser el Sábado Santo. En alguna ocasión nuestro consiliario nos ha animado a fijarnos en esos primeros cofrades del Santo Entierro que, con José de Arimatea a la cabeza, enterraron a Cristo; los que permanecieron junto al sepulcro recordando sus palabras, su Pasión y Muerte, y esperando su prometida Resurrección. Pues, hermanos, desde la fundación de nuestra Cofradía somos depositarios de la tradición de esos primerísimos cristianos, y por lo tanto, debemos ser modelo dentro de la Iglesia permaneciendo junto al sepulcro del Señor. Y posiblemente la mejor forma de hacerlo sea con un acto-procesión del Santo Entierro, que nos ayude a meditar e interiorizar estos misterios.

J. Mongil

                               

Agenda diocesana

Nuevo número de Iglesia en Valladolid

El nuevo número de la revista diocesana Iglesia en Valladolid, correspondiente a la segunda quincena de octubre, la se puede ver y descargar haciendo click aquí.

Concurso de fotografía de Semana Santa

La Junta de Cofradías ha puesto en marcha el Concurso de Fotografía para elegir el cartel de la Semana Santa 2015.

Las bases se pueden descargar de la web de la Junta de Cofradías.

Premio "Servir" para la Junta de Cofradías

El Rotary Club de Valladolid ha concedido a la Junta de Cofradías de Semana Santa su Premio "SERVIR", en el que se reconoce la labor de esta institución en la promoción y defensa del nombre de nuestra ciudad.

La entrega del galardón se llevará a cabo el próximo viernes 7 de noviembre en el Casino de Boecillo, en una cena benéfica.

Convivencia de jóvenes cofrades

martes, 14 de octubre de 2014

II Semana de Religiosidad Popular

Os animamos a participar en las charlas de la II Semana de Religiosidad Popular, organizada por la delegación de Religiosidad Popular del Arzobispado de Valladolid.

Del 3 al 7 de Noviembre de 2014
Salón de Actos de Acción Católica (Antiguo Teatro Cervantes)
20,30 Horas

Lunes 3
"Que espera la diócesis de las cofradías"
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Ricardo Blázquez Pérez, Arzobispo de Valladolid
Martes 4
"La espiritualidad Cofrade"
Rvdo. Sr. D. Julio Alberto de Pablos de la Esperanza, Director del Centro Diocesano de Espiritualidad
Miércoles 5
"Significado de Cofradía y Hermandad"
Rvdo. Sr. D. Oliver Fernández López, Capellán de la Residencia "Ntra. Sra. del Carmen"
Jueves 6
"La figura del Consiliario y del Párroco"
Ilmo. Sr. D. Luis Argüello García, Vicario General de la Archidiócesis de Valladolid
Viernes 7
"Reflexiones desde la Acera"
D. Angel Cuaresma Renedo, Periodista

Convocatoria Cabildo General Ordinario

De conformidad con el artículo 23.1 de los nuestros Estatutos, el próximo 19 de octubre a las 12,00 h en nuestra sede del Real Monasterio de San Joaquín y Santa Ana, celebraremos Cabildo General Ordinario,

El orden del día del Cabildo lo puedes consultar en la carta que te habrá llegado a tu domicilio y que ya está disponible para su descarga desde este blog (menú de la parte izquierda).

Esperamos tu participación.

martes, 7 de octubre de 2014

Cristo yacente y la Eucaristía. Una reflexión.

No creo que nada ocurra por casualidad. De una u otra manera, la Eucaristía ha estado presente en nuestra Cofradía a largo de su historia. A finales de los años 80 y principios de los 90 del siglo pasado, un buen grupo de cofrades asistíamos a la celebración del Corpus Christi en el emblemático y cidiano Monasterio Cisterciense de San Pedro de Cardeña (Burgos). Allí, compartíamos la celebración eucarística con los monjes, en la sillería de la iglesia cenobial y, acto seguido, salíamos vestidos con nuestros hábitos y luciendo nuestros guiones, acompañando al Santísimo Sacramento por los hermosos alrededores ajardinados del monasterio.


Procesión del Corpus Christi en San Pedro de Cardeña (1992)

Mucho más recientemente, en los dos últimos años, hemos participado en la procesión del Corpus de Valladolid, con un altar eucarístico presidido por una imagen de San Bernardo de Claraval, cedido por la comunidad cisterciense de San Joaquín y Santa Ana. En esta procesión ya se participaba con una representación de la Junta de Gobierno, pero desde 2013 los altares situados en la puerta de nuestra iglesia muestran nuestra clara vocación por la Eucaristía. La cuidadosa preparación de estos altares, me recuerda también el trabajo minucioso de la preparación del “monumento” para recibir al Santísimo después de la Misa de la Cena del Señor el Jueves Santo en nuestra iglesia: la Sagrada Comunión acompañada siempre por un sencillo y simbólico ornato, y delante el Santo Cristo yacente. Cuánto mimo y preocupación se pone todos los Jueves Santos; incluso cuando surgían problemas y trabas, siempre desde la Cofradía, con el apoyo de la comunidad de religiosas, luchamos por tener al Señor presente, y las miles de personas que lo visitan cada año ese día nos lo agradecen infinitamente.

                          

Altar de la procesión del Corpus Christi (2014)

¿Fue casualidad que nuestra procesión titular que salió por primera vez en 1964 se programara para la noche del Jueves Santo? Cuando los activos cofrades de aquella época idearon una procesión propia, quizás pensaron en otro momento dentro de la Semana Santa vallisoletana, pero finalmente fue en la noche del día más eucarístico del Triduo Pascual cuando esta procesión, que ahora ha cumplido medio siglo, se hizo un hueco en el programa oficial. Y es que cuando Jesús instituyó la Eucaristía en la Última Cena, dijo a los apóstoles: “Tomad, comed, éste es mi cuerpo”. “Este es mi cuerpo” parece que nos repite cuando miramos a Cristo yacente. Un cuerpo muerto y dolorido, machacado y molido, porque sin Pasión y Muerte no hay Resurrección. ¿No es este el Pan Partido?. También les dijo tomando el cáliz: “Bebed de ella todos, porque ésta es mi sangre de la Alianza, que es derramada por muchos para perdón de los pecados”. ¿Veis la sangre derramada al mirar a nuestro Santo Cristo?. La sangre de las llagas de los pies, de las manos y del costado, es la sangre del nuevo sacrificio, de la nueva Alianza, para el perdón de nuestros pecados.

Curiosamente, de forma tradicional y sin que se conozca a ciencia cierta el origen de esta costumbre, existen algunos casos en los que la Sagrada Forma se colocaba sobre las imágenes de Cristo Yacente en el día de Jueves Santo. El Yacente de Gregorio Fernández del Convento de San Pablo de nuestra ciudad, por ejemplo, tiene un corte de forma cuadrada en el pecho, junto a la llaga del costado, que a modo de tapa se levantaba por albergar la Sagrada Forma. Otros Yacentes con esta peculiaridad se conservan en el Convento de las Descalzas Reales de Madrid (de Gaspar Becerra en este caso), y en la iglesia de Jesús Nazareno de Valladolid, como bien señala el blog artevalladolid en este post.

                         

Yacente del Convento de San Pablo de Valladolid (artevalladolid)

                          

Yacente de las Descalzas Reales de Madrid, obra de Gaspar Becerra (artevalladolid)

                          

Yacente de la iglesia penitencial de Jesús Nazareno de Valladolid (artevalladolid)

Cuando hace unos meses tuvimos el honor de recibir el premio Corpus Christi 2014 por parte de la Archicofradía del Santísimo Cuerpo de Cristo “Señor del Mundo” y Santo Entierro de Alcantarilla (Murcia), la Junta de Gobierno de la institución murciana basaba el galardón en “al amor mutuo que profesan ambas instituciones hacia el Santísimo Sacramento y la figura de Jesús Yacente en el Santo Entierro”.

                           

Yacente y custodia de Alcantarilla (Murcia)

Los Misterios Pascuales del Señor no pueden dividirse, porque en conjunto conforman nuestra fe. Y ser cofrade es una manera privilegiada de vivirlos en y con la Iglesia y en íntima comunión con Cristo. En esa tarde-noche tan ajetreada del Jueves Santo, no dejemos de visitarlo y acompañarlo. Y, contemplando a este Cristo sufriente, no nos olvidemos de nuestros hermanos más necesitados, haciendo realidad el lema pastoral de este año en nuestra Diócesis: "entramos en la iglesia para adorar y salimos para servir".

J. Mongil

miércoles, 1 de octubre de 2014

Agenda diocesana (1ª quincena de octubre)

Nuevo número de Iglesia en Valladolid

Enlace para descargar el último número


¡Buen curso pastoral! (Carta del Sr. Arzobispo)

"Al empezar el nuevo curso pastoral saludo a todos cordialmente. Después del descanso del verano comenzamos con decisión y esperanza las tareas que el Señor nos encomienda, porque el trabajo es abundante y continúa fiándose de nosotros. Acudimos gozosamente a la nueva cita del Señor: "Id a mi campo". "Aquí estamos, Señor, envíanos", respondemos nosotros."

Este año entra en vigor el “Directorio Diocesano de los Sacramentos de la Iniciación cristiana”, que fue aprobado hace algún tiempo y presentado en la diócesis. También comienza a ser utilizado, después de la debida aprobación el Catecismo de la Conferencia Episcopal Española “Testigos del Señor” que continúa hasta con las mismas palabras el ya conocido “Jesús es el Señor”. Inician entre nosotros su andadura Directorio y Catecismo en el nuevo curso otorgándole una característica catequética especial. Son dos instrumentos autorizados para la transmisión de la fe dentro de la comunión de la Iglesia. Han sido presentados a las comunidades cristianas no como interesantes novedades bibliográficas, sino como servicio a la fe de los cristianos y a la evangelización. No olvidemos que la catequesis es una de las acciones básicas de la Iglesia. No son simplemente escritos valiosos de personas singularmente capacitadas, sino acto de entrega eclesial, que nosotros dócilmente recibimos ya que no somos espontáneos sino enviados. En el envío de la Iglesia se actualiza la llamada del Señor y el encargo que nos hace a salir como apóstoles. No nos apoyamos en nuestra sabiduría sino en el nombre del Señor.

El Catecismo “Testigos del Señor” está llamado a continuar el proceso de la Iniciación cristiana con “Jesús es el Señor” hasta la confirmación. Los dos forman, por tanto, una unidad para la preparación básica de niños y adolescentes. Los cristianos en la Iglesia recibimos el Evangelio, compartimos la fe y deseamos transmitirla a las nuevas generaciones pasándoles el testigo. Por ello, en la Iniciación se trata de la formación básica, común, íntegra y necesaria; no de algo ornamental, peculiar, parcial y superfluo. Es conveniente, consiguientemente, que las expresiones y fórmulas sean compartidas por todos. Así se acrecienta el patrimonio de la Iglesia que se entrega y recibe de generación en generación. Profesamos la fe con las palabras de nuestros padres y oramos como han rezado quienes nos han precedido en la vida cristiana. Las preguntas y respuestas que contiene el Catecismo al final facilitan la formación de un mismo lenguaje; no despreciemos el ejercicio de la memoria, ya que la memorización inteligente potencia la actualización de los contenidos. Por otra parte, las ilustraciones del Catecismo ayudan a unir la verdad del Evangelio con la belleza que se refleja en la historia de la Iglesia. Las vías de la verdad, del amor y de la belleza discurren unidas en la tradición cristiana.

El Catecismo “Testigos del Señor” se estructura de manera original, a saber, siguiendo la celebración de la Vigilia pascual, e incluyendo en este esquema lo correspondiente a los artículos del Credo, a los Sacramentos, a los Mandamientos de la Ley de Dios propuestos con el espíritu del Sermón del monte y a la Oración. De esta manera se funden los cuatro pilares del Catecismo con la perspectiva básica de la Vigilia pascual. El Catecismo de la Iglesia Católica ordenó la totalidad de contenidos con las siguientes partes: La profesión de la fe, la celebración del misterio cristiano, la vida en Cristo y la oración cristiana, que desde antiguo son los pilares de la iniciación y maduración de los cristianos.

Cinco partes tiene el Catecismo siguiendo la Vigilia pascual: Jesucristo es la Luz, la Palabra, la Verdad, la Vida y el Camino.

1) La Vigilia pascual empieza con el llamado lucernario, con una celebración de la luz, en que cantamos a Jesucristo como Luz del mundo, como luz que ilumina la oscuridad de la humanidad y las tinieblas del corazón. Jesús como luz viene a nuestro encuentro para mostrarnos el camino y para que no nos extraviemos. Unamos siempre la Luz que es Cristo con la luz existencial para asegurar nuestros pasos.

2) La segunda parte de la Vigilia pascual se dedica a proclamar la Palabra de Dios en la Sagrada Escritura, desde el comienzo del mundo que Dios creó por su Palabra que es Jesucristo. Es significativo que ante la asamblea se coloquen en proximidad el ambón, desde donde se proclama la Palabra de Dios, y el cirio encendido que simboliza a Jesucristo resucitado. Jesús resucitado es la clave para leer las Escrituras santas, como subraya reiteradamente la oración del sacerdote que sigue a cada salmo y a cada lectura. Todas las Escrituras hablan de Jesucristo (cf. Jn. 5, 39).

3) Hay un itinerario de la Palabra a los hombres que culmina en Jesucristo, plenitud y mediador de la Revelación de Dios. Jesús es el rostro vivo y personal de la Palabra de Dios. Es imagen del Dios invisible y la Verdad encarnada (cf. Jn. 1, 17-18; Col. 1, 15). Jesús es el centro de la fe cristiana, en quien se revela el misterio de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo y se manifiesta el sentido del hombre.

4) La cuarta parte del Catecismo desarrolla que Jesús es la Vida, y que a través de los sacramentos del Bautismo y de la Eucaristía celebrados en la Vigilia pascual recibimos la vida eterna, entramos en su reino, formamos parte de la asamblea de los santos. La radicación de “Testigos del Señor” en la Vigilia pascual nos enseña que la catequesis, además de instrucción en la Verdad, es también celebración litúrgica.

5) Finalmente, Jesús es el Camino. En la renovación de las promesas bautismales los cristianos renunciamos al pecado y nos adherimos a Jesucristo. El en persona, su predicación y signos, su forma de vivir y de morir, su resurrección y glorificación, son Camino para nosotros. Quien le sigue no camina en las tinieblas sino que tendrá la luz de la vida. La Vigilia pascual, que proporciona el esquema del Catecismo “Testigos del Señor”, nos introduce en un camino de esperanza, en la forma pascual de vivir, pasando diariamente de la muerte al pecado a la vida en Cristo, del egoísmo a la fraternidad, de la tristeza al gozo. Nos ayuda a unir la fe profesada con la fe celebrada, vivida y hecha oración.

A todos deseo un curso pastoral fecundo, que estará especialmente caracterizado por la atención a la catequesis, a la formación fundamental en la fe y a la personalización de lo que creemos y esperamos en medio de nuestro tiempo y de nuestro mundo.

Ricardo Blázquez
Arzobispo de Valladolid

(tomado de www.archivalladolid.org)